Terraza Urbana
"Mucho se habla sobre un diseño minimalista pero poco se entiende sobre su verdadera naturaleza. A quien pensar que excluye las posibilidades sensoriales del entorno, lo imbuye de monotonía. Pero basta mirar de cerca y comprender su lenguaje silencioso para darse cuenta de que monótono nada.
En una mirada distraída, este proyecto podría parecer monótono, sin variaciones. ¿Pero quién dijo que en monocromo no hay policromía, por paradójica que pueda parecer? La materia aquí es en gran parte responsable de la modulación de los sentidos que se despliega ante los ojos.
El uso de revestimiento de piedra es quizás el gran director de esta sinfonía silenciosa. Cada piedra es única, como una huella dactilar telúrico, y lleva en su formación, siglos de transformaciones y combinaciones de fuerzas poderosas, expresiones traducidas en los diferentes matices que, grano a grano, van constituyendo. Aquí esta ascendencia, conecta el interior y el exterior, confiriendo unidad entre las partes, reflejada simbólicamente también, entre el espacio y lo humano. Un monolito de mármol conecta con el suelo con la zona verde, recordando los tiempos en que grandes bloques de piedra eran portales entre los mundos.
El sol latente en esta cubierta es apaciguado por el manto encajado de follaje tropical combinado con el techo de listones que conduce a la piscina, que a su vez está flanqueada por parterres de árboles y palmeras inmersos bajo las aguas. Un perfume verde y fresco completa el paisaje, barroco en los sentidos, pero aspecto minimalista."